Método Núñez para dejar de fumar.
Le he puesto este nombre como homenage a mi madre.
Este método para
dejar de fumar tiene en cuenta que:
La nicotina se
elimina del cuerpo al cabo de una hora y por tanto en ese tiempo se
da el síndrome de abstinencia. Pero “el mono” es tan
insignificante que basta una ligera actividad para que se olvide y no
se le haga caso. Otra prueba de lo insignificante que es el síndrome
de abstinencia que se pueda dormir mas de una hora seguido sin
inmutarse, si fuese un mono significativo pertubaría el sueño de una
manera mas grave.
El tabaco engancha
por el sabor que crea en la boca. Para comprobar esta afirmación
basta con pensar cuando apetece más fumar. Por las mañanas después
de desayunar se tiene impregnada la boca de los sabores de los
alimentos del desayuno, y apetece mucho fumar. Después de cada
ingesta de alimentos y mas si esta es abundante o si tienen un sabor
fuerte aparece un deseo de fumar, es muy típico que después de
tomarse un café que la boca se “limpia” de sabor a tabaco
apetece fumar hasta conseguir que el aroma del humo del tabaco vuelva
a la boca, y si es necesario se fuman varios cigarros seguidos.
El método consta de
dos fases, la primera es ejercitar la voluntad y la segunda es el
dejar de fumar. Tiene como intención que el dejar de fumar de un
modo que sea fácil provocando los mínimos malestares posibles, que
para mi si tienes que sufrir mucho dejando de fumar no merece la
pena. Pero con el precio del tabaco es muy caro hace también
interesante económicamente el dejar de fumar, cuando comprobé que me
gastaba más en tabaco que alimentación decidí que tenia que
dejarlo. Me pareció intolerable que el estado abusara con el
tabaquismo para sacar dinero en vez de vigilar nuestra salud.
Primera
fase: ejercitar la voluntad.
Todo vicio implica
la supresión de la voluntad , es como si se volviera a ser un niño
pequeño que no es capaz de atender a otra cosa que el satisfacer su
vicio. Un niño es tanto mas pequeño cuanta menos capacidad tiene de
no hacer cosas que el desea, cosa que en bebés es imposible, quiere
algo y hasta que no lo consigue no descansa. Este “como volver a
ser un niño pequeño” es una regresión mental que hace más
difícil el “vencer al vicio”. Hay que tener en cuenta que el
hábito refuerza la regresión mental porque incita al consumo y este
refuerza el hábito.
En este circulo
vicioso es el que se encuentra el fumador, y el método consistirá
en reforzar la voluntad con lo que vamos a la raíz del problema. No
como la totalidad de métodos para ayudar a dejar de fumar que
inciden sobre la nicotina, la simulación de fumar o simplemente el
comer o masticar algo para que se calme la ansiedad que crea el dejar
de fumar.
Primer
ejercicio. Retrasar el comienzo de fumar.
Si tiene por
costumbre, por ejemplo, empezar a fumar a las 8 de la mañana o 5
minutos después de levantarse o después de tomarse un café,
espérese 5 minutos y después hágalo normalmente. Después de varios
días podrá retrasarlo más, y progresivamente podrá llegar a los
20-30 minutos que puede ser el limite razonable. El objetivo es
aprender a no comenzar a fumar, de ahí la limitación temporal que
hace que el ejercicio sea asequible con esfuerzo, para todos.
De cualquier manera
puede dejar de hacer el ejercicio los días que quiera, y no por ello
se debe de sentir culpable. Solamente debe ser consciente de que lo
deja y los retoma las veces que considere.
Un consejo cuando se
está acompañado y estos fuman, si le ofrecen un cigarro acéptelo
pero dígales que se lo fumará después, el próximo día seguro que
se lo pensarán antes de ofrecérselo y llegará el día que no se lo
ofrezcan. Pero no les comente nunca que esta haciendo el ejercicio
sino le harán la gracia de boicotearle el ejercicio.
Segundo
ejercicio. Fumar a cada hora.
Después de empezar
a fumar, fume de manera obligatoria un cigarro cada hora, nunca más
ni menos de un cigarrillo por hora. Hágalo siempre que las
limitaciones al fumar se lo permitan, pero tenga en cuenta cuando
empezó a fumar y cuando le corresponda fume, no en otro momento no compense los cigarrillos no fumados.
Hay momentos en los
que apetece mas fumar, por ejemplo si ha comido, se ha tomado un café
o si esta tomando una copa, esos momentos son los mas difíciles y en
los que hay demostrar que el primer ejercicio se puede hacer en
cualquier momento. Ten en cuenta que si consigues pasar esos momentos
alégrate, estás a punto de estar en condiciones para dejar el
tabaquismo. Si no te encuentras con fuerzas para resistirte a fumar
fuerza la situación estando en lugares en los que no puedes fumar,
“olvídate” el tabaco en el coche... cualquier invención que
hagas.
Una cosa muy
importante no le digas a nadie, a nadie eh, que estás haciendo este
ejercicio es mejor evitar que pienses como si hicieras una
heroicidad, pues a continuación “reclamaras psicológicamente un
premio” y como es difícil que “el premio” le compense durante
mucho tiempo le aparecerá la insatisfacción, la frustración y le
aparecerá el mal humor, cosa que hay que evitar siempre. Tenga en
cuenta que la insatisfacción y la frustración tomada como algo
continuado proveniente de no fumar es algo muy negativo, y te instala
en la vida una desazón que en mi opinión no merece la pena dejar de
fumar.
Segunda
fase. Dejar de fumar.
La primera fase
durará entre una y dos semanas, pero siempre dependerá de como
lleves los ejercicios. Escoger el momento de dejar de fumar no debe
ser motivo de especial preocupación, ese día sera un poco mas
prolongado el retraso de empezar a fumar, y es lo debes pensar estás
retrasando el empezar a fumar , repitiendo el primer ejercicio como
si fuera un día cualquiera. No sientas que estás haciendo una
heroicidad vívelo como lo que es una normalidad estar sin fumar,
respirar lo hacemos naturalmente y nunca le echamos cuenta, ni vamos
diciendo he estado respirando todo el día.
Ese día haz cosas
diferentes, si desayunas abundantemente tomaté un desayuno mas
ligero y pica algo a media mañana, o aprovecha si tienes que hacer
un viaje para dejar de fumar o unas vacaciones, o cambia la posición
de los muebles y quita los ceniceros de la vista, si estás
trabajando no acompañes a los compañeros fumadores ese día o
intenta estar donde no esté permitido fumar...
Cuando te ofrezcan
un cigarro si es una persona conocida no le digas que no lo quieres
porque estas dejando el tabaco, dile que lo acabas de tirar que
después se lo aceptas o cógeselo y te lo guardas diciendo que te
vendrá muy bien para después.
En ese día es muy
importante que no digas que estás dejando de fumar, y no está
permitido que te cabrees con nadie, guarda silencio y agacha la
cabeza cuando alguien le enoje, piensa que lo provoca su vicio que
intenta frustrarle para que vuelva a fumar.
Y váyase a dormir lo
antes posible.
Al dia siguiente
verá que no ha sido demasiado difícil el primer dia, y pensará que
puede fumarse cigarro, y es cierto puede fumar cuando quiera pero no
fume hasta dentro de una semana para darse verdadera cuenta de que ha
vencido su vicio y que tan solo es cuestión de voluntad. Y que a
partir de ahora fumará solo cuando le apetezca realmente. Lo mismo
que cuando te tomas un dulce o un trozo de chocolate o un refresco.
Villanueva de la
Serena , a 8 de octubre de 2013.